ENTRE EL MITO Y LA REALIDAD
Pero existen otro tipo de placeres y diversiones que a la mayoría de las personas nos causaría repugnancia y es increíble aceptar que hay personas que los disfrutan que son alucinantes, los hace vibrar y llegar al éxtasis.
Algunos parecen ser mitos y otros... realidad:
ERZEBETH BATHORY "LA CONDESA SANGRIENTA"

Nació en 1560 Transilvania, de familia acomodada, se le culpa de haber matado y torturado a mas de 600 muchachas, tenía una perversión sádica y sexual, sentía una atracción especial por la sangre, le gustaba beberla y bañarse en ella con el fin de impedir que envejeciera su piel. Sus placeres: el olor de la muerte, las orgías lésbicas, secuestraba mujeres jóvenes, las drogaba y las azotaba, después las encadenaba y las acuchillaba las dejaba desangrar para llenar su bañera. Fue condenada a una muerte lenta, la encerraron en el dormitorio de su castillo, le pasaban un poco de agua y desperdicios de comida. Murió a los 4 años de permanecer en estas condiciones, muere en 1614 a la edad de 54 años.
JACK "EL DESTRIPADOR"
Londres 1888.
De identidad desconocida, frecuentaba calles obscuras y nebulosas, le gustaba visitar los barrios de prostitutas quienes se convertirían en sus víctimas. Asesinaba de manera brutal, abría en canal a sus víctimas dejando a la vista todo lo que se encontraba dentro. Se comenta que llevaba cuchillos en una bolsa negra, que tenía conocimientos médicos y que vengaba la muerte de su hijo quién murió por causa de una enfermedad por contagio de una prostituta. Hasta ahora su identidad sigue siendo un misterio.
ANDREI CHIKATILO "EL HANNIBAL RUSO"

ED GEIN "ED"

Ed sentía gran atracción por la anatomía humana así que empezó a profanar tumbas de jóvenes recientemente fallecidos y se las llevaba a su casa dónde curtía las pieles y hacía objetos con ellas, tenía cráneos que utilizaba como platos, corazones humanos en sartenes, un collar de labios humanos, cinturones de pezones, un chaleco de vaginas, incluso hasta comió partes humanas. Se le culpó solo por el asesinato de una mujer que fue encontrada colgada del techo boca abajo y enganchada de los tobillos, sujeta por poleas y el cuerpo abierto en canal desde el pecho hasta el abdomen y las viseras extraídas.
Se sospecha de algunos otros asesinatos de mujeres desaparecidas. Al final se declaró enfermo mental y murió por causa natural en el verano de 1984 a la edad de 78 años.
Todos ellos tienen placeres en común, cometer crímenes horribles sólo por la satisfacción de ellos mismos. En México también existen asesinos seriales, aunque sus métodos no son tan violentos ni llegan a tener una cantidad tan alta en víctimas no se disculpan de cometer estos crímenes, aunque aquí se hace mas por poder y dinero que por enfermedad mental.
Si quieres saber mas acerca de estos asesinos y otros mas visita la expo de Asesinos Seriales en el museo de la Policía en la calle de Victoria col. Centro.